3.1 Factores Ambientales

3.1     Factores Ambientales

Algunos estudios epidemiológicos ha demostrado que en las poblaciones con mayor incidencia de CCR, existe un predominio de dietas ricas en carne y grasa (sobre todo de origen animal) y pobres en fibra. La forma de preparación de los alimentos también parece influir en el riesgo de desarrollar la enfermedad, siendo mayor, cuanto mayor sea el tueste o fritura de la carne. Aunque el mecanismo de protección inducido por la fibra no esta claro, esta produciría heces de gran volumen, favoreciendo el transito rápido por el colon y con ello un menor tiempo de contacto de los posibles carcinógenos, con la mucosa colónica expuesta. La vehiculación de los posibles carcinógenos de la dieta por las heces, explica su aparición sincrónica o metacrónica. Se ha sugerido un mayor riesgo de padecer esta enfermedad en situaciones de colelitiasis y colecistectomia, atribuyéndose a una mayor concentración de ácidos biliares en la luz intestinal en donde actuarían como inductores de la proliferación celular a dicho nivel. Otros componentes de la dieta tales como el calcio y la vitamina D, también parecen tener un efecto protector. En el caso de las vitaminas C, A y E, los estudios no han sido concluyentes.

Tabaco y Alcohol : se han asociado a incidencias elevadas de cáncer pero no todos los estudios son coincidentes. Sin embargo el consumo regular de AINEs, parece tener efecto protector, sirviendo de base epidemiológica para el inicio de estudios de quimioprevención. Otros factores de riesgo, no relacionados con la dieta, son la exposición a radiaciones ionizantes, asbesto, y ausencia de actividad física. En mujeres postmenopáusicas se ha visto una menor incidencia del Carcinoma de colon pero no del Carcinoma rectal.